Todos aquellos que disponemos de perfil en una red social, en un blog o en una página web, todos aquellos que intervengan en foros de internet o que subieran vídeos en youtube, han subido un contenido e información que puede perdurar una vez llegue el fin de nuestros días. Hay personas que desean que sus contenidos, como en el caso de los artistas, perduren una vez mueran y pueden existir usuarios que deseen que una vez mueran, se elimine toda esa huella digital.
¿Cuál será mi legado digital?
El uso de Internet a lo largo de toda nuestra vida deja, inevitablemente, una huella digital. Todos tenemos, de una u otra manera, una identidad digital que se va formando a lo largo de toda nuestra vida, pero ¿Qué pasa cuando morimos?, ¿También muere nuestra identidad digital?, ¿Qué pasará con todo el contenido que he publicado o compartido?
¿Cómo preparar la transmisión?
Aunque no sea muy habitual todavía, nada nos impide poder especificar cuál es la voluntad sobre nuestra herencia digital, de esta forma se hace mucho más fácil la interpretación de nuestros deseos. Existen dos formas de hacer esta transmisión:
- Transmitir el activo digital con el resto de nuestros derechos y obligaciones vía testamentaria, es decir, ante notario, de la forma convencional.
- Encargar a una empresa especializada en la gestión de estos asuntos, tras nuestra muerte. Ellos se ocuparán de cerrar todas nuestras cuentas y perfiles en las redes sociales, correo electrónico, suscripciones, transferir archivos alojados en la nube a los herederos o bien limpiar nuestro rastro digital.
“Aunque ahora es poco frecuente, dentro de unos años, será habitual prestar atención en la gestión del legado digital de todos aquellos que fallecieron”
¿Qué debo hacer si soy el heredero digital?
Si te ha tocado asumir esta responsabilidad, lo primero que debes hacer es saber si el fallecido ha administrado su herencia digital y cuáles son sus voluntades. En el caso de esta gestión no esté hecha, deberás hablar con sus familiares más allegados para decidir qué hacer. Cada red social o servicio establece, en sus condiciones generales, la forma de proceder en estos casos.
Aprende a gestionar tu identidad digital
Para aprender a gestionar nuestra identidad digital, en vida, debemos tener claros 3 conceptos (Visibilidad, Reputación y Privacidad). De esta forma podremos gestionar nuestra huella digital de una forma más fácil.
- Visibilidad. Hace referencia a la popularidad que tenemos o lo conocidos que somos a nivel online. Dependiendo de si se trata de una identidad digital personal o profesional, nos puede interesar ser más o menos visibles. Por ello, podemos incrementar nuestra visibilidad haciendo un uso de servicios geolocalizadores y aportando contenido, de forma frecuente, de todo lo que nos interese. O bien hacer publicaciones menos personales, sin más información adicional.
- Reputación. Se refiere a la opinión que los demás usuarios tienen de nosotros y se mide en función del impacto que compartimos. La Reputación digital influye en qué decimos, dónde lo decimos, cómo lo decimos, etc…. Reputación y visibilidad son conceptos muy relacionados, dado que la visibilidad hace posible la reputación y la reputación puede aumentar o reducir la visibilidad. Para conocer qué visibilidad o reputación digital tenemos, disponemos de herramientas específicas como Google Analytics, Howsociable., Mentionmapp o Klout.
- Privacidad. Aquí es donde podemos gestionar de una manera más directa nuestra identidad digital, ya que es donde definimos qué queremos publicar y qué no, incluso quién queremos que vea la información que publicamos y quién no. Para poder controlar y gestionar la identidad digital es imprescindible leer, con atención, las políticas de privacidad.
Algunos consejos para gestionar tu identidad digital
- Son muchas las personalidades, profesionales o empresas que deciden adquirir dominios con sus nombres o marcas, intentando bloquear el deseo de terceras personas de adquirir dominios que puedan usurpar la identidad, posicionarse en google con contenidos negativos o confundir a los usuarios. Es aconsejable registrar los dominios .es .com y .net.
- Es importante revisar las opciones de configuración de las diferentes redes sociales. En el caso de Facebook, por ejemplo, podemos decidir si queremos que nuestros contenidos se muestren solo a amigos, a amigos y a sus amigos, o a todo el público. También existen opciones en esta red social para eliminar el acceso de terceros a los datos de contacto de un usuario.
- ¡Publicación de contenidos! Si publicamos nuestros propios contenidos y disfrutamos de presencia en blogs, redes sociales o foros, cuando alguien busque acerca de nosotros, encontrará información gestionada por nosotros en vez de encontrar contenidos publicados por terceros acerca de nuestro negocio o persona.
- Internet ofrece el intercambio de información y opinión, pero eso no legitima a quienes deseen insultar o menoscabar nuestro honor. Si eso sucede, denúncialo a las autoridades competentes.
- Contrata un servicio online de rastreo. Existen agencias digitales que pueden ofrecerte un mapa de tu identidad digital, esto es útil porque no siempre sabemos hasta donde llega nuestra marca, hasta donde se habla y cuáles son los contenidos publicados en internet.
