Cuando hablamos de un ERP (Enterprise Resource Plannig, en español Planificación de Recursos Empresariales) nos referimos a un conjunto de sistemas de información que integran las diferentes operaciones de una empresa, como la producción, la contabilidad, la logística, los envíos y los inventarios. El principal objetivo de un software de gestión ERP es apoyar a los clientes de la empresa, solucionar de manera rápida las posibles incidencias y problemas, minimizar los costes y manejar de manera eficiente la información que permita la toma de decisiones para aumentar los beneficios. Asimismo, este tipo de software de gestión es aplicable a todo tipo de empresas y las características y servicios que ofrecerá, dependerá de varios factores como el tamaño de la empresa, los procesos que lleva a cabo, los recursos disponibles, el tipo de empresa, entre otros.
Los beneficios que nos aporta un software de gestión ERP
La inversión por parte de una empresa de instalar un software de gestión de este tipo, responde a la necesidad de solucionar problemas y aumentar los beneficios, todo ello reduciendo al máximo los costes de gestión. Entre los numerosos beneficios que nos proporcionan, queremos destacar algunos que creemos imprescindibles para tomar una decisión. El primer beneficio es sin duda el ahorro que nos proporciona a largo plazo. Con la implantación de un software de gestión ERP ahorramos dinero, así de simple. Con un sistema integrado de gestión tendremos la solución a nuestro negocio de forma fácil y sencilla sin necesidad de contratar múltiples servicios, lo que conlleva un aumento del coste. El segundo gran beneficio es que un sistema de gestión ERP nos facilita la toma de decisiones porque nos cuenta todos los datos de una empresa en una sola pantalla. Con una disponibilidad permanente de los datos de nuestro negocio y una buena planificación, podremos tomar decisiones más acertadas y más rápidamente. De esta manera, podremos responder ante un cliente en un tiempo menor y ofrecerle una trazabilidad más rápida, en definitiva, nuestra empresa podrá ofrecer una mayor calidad en su servicio de atención personalizada al cliente.
Por otro lado, con un software de gestión ERP tendremos todos los datos de nuestra pyme debidamente protegidos, tanto de los posibles robos o accesos desautorizados, como de la propia seguridad de los datos en sí. Todas nuestras gestiones quedarán protegidas con un solo sistema. Otro de los beneficios más evidentes es el aumento de la productividad de los trabajadores, con un sistema integrado se elimina la duplicidad del trabajo y las operaciones redundantes, automatizando cada una de las gestiones de una empresa. De la misma forma, cuando todos los departamentos trabajan con la misma herramienta, se sigue un proceso ordenado y estandarizado por todos, asumiendo la propia responsabilidad dentro del proceso y se llega a una reflexión personal acerca de nuestra labor dentro de la empresa. Por último, un software de gestión ERP impulsa el crecimiento ordenado de todas las pymes. Ayuda a tomar decisiones en el momento oportuno y ver los puntos débiles a reforzar.
